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Síntomas de la
hipoacusia o sordera.

Dra. Paola Freire
Otorrinolaringóloga

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Hoy hablaremos de la hipoacusia, que consiste en la disminución de la sensibilidad o capacidad de audición que afecta los oídos. Este trastorno es relativamente común y puede presentarse en diferentes grados y en cualquier etapa de la vida. Los síntomas se presentan cuando tienes dificultad para seguir una conversación; para identificar sonidos en ambientes donde hay ruido, especialmente si provienen de más de una fuente; para percibir sonidos agudos e incluso cuando se presenta falta de equilibrio o la sensación de este. Si bien las prótesis auditivas convencionales pueden ayudar, a veces no terminan de ser suficientes. No obstante, para tener un diagnóstico adecuado y determinar el tratamiento adecuado, es indispensable conocer cómo funciona la audición.

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Partes
del oído

[/vc_column_text][vc_empty_space height=»12px»][vc_column_text]Hay tres partes principales en el oído:

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¿Cómo funciona
la audición?

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Lo primero a tener en cuenta para entender cómo funciona la audición y cómo oímos, es comprender el rol de los sonidos, que son vibraciones invisibles que viajan por el aire.

Existen diferentes fuentes o emisores de sonido como lo puede ser el habla, el crujido de las hojas, el teléfono que suena, o en general cuando se emite un sonido. El aire se encarga de llevar esas vibraciones, conocidas como ondas sonoras, en diferentes direcciones.

Las ondas sonoras, que captan los oídos, en su mayoría son únicas y tienen diferentes características: de acuerdo a su frecuencia pueden ser agudas (altas) o graves (bajas). Nuestro cerebro es el encargado de interpretar los mensajes que previamente captaron los oídos como ondas sonoras. Si nuestros oídos funcionan bien, la información que se lleva al cerebro será más clara, permitiendo a la persona oír y desarrollar de manera normal sus habilidades lingüísticas.

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De esta manera
lo hace

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a) Un sonido entra en el conducto auditivo externo. Al producirse un sonido, las vibraciones u ondas sonoras entran y se desplazan a través del conducto auditivo hasta chocar con el tímpano.
b) La membrana timpánica o tímpano vibra.
c) Esto genera que los tres huesecillos vibren a su vez, transmitiendo el sonido hacia el oído interno..
d) La vibraciones viajan por el “laberinto”.
e) Las vibraciones viajan a través del líquido del oído interno, este laberinto en forma de espiral, y activan la cóclea, encargada del proceso de convertirlas en impulsos eléctricos o señales químicas para que sean reconocidas por el nervio auditivo.
f) El cerebro interpreta el sonido.
g) Después que el nervio auditivo envía la información al cerebro mediante impulsos o señales eléctricas, el cerebro tiene la tarea de interpretarlas, reconociendo finalmente un determinado sonido.

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Causas de
la hipoacusia

[/vc_column_text][vc_empty_space height=»12px»][vc_column_text]Así como existen diferentes tipos de hipoacusia, las causas también son muchas y variadas. La audición supone una transmisión compleja y delicada del sonido a través del oído externo, medio e interno, de modo que el daño en cualquiera de estas partes puede afectar la audición.

De igual manera, el envejecimiento, los factores genéticos, la exposición prolongada a ruidos fuertes, algunos medicamentos, las infecciones del oído medio, lesiones en la cabeza y afecciones médicas como la enfermedad de Méniére pueden ser también causantes de hipoacusia.

Asimismo, puede aparecer desde el nacimiento o ser ocasionado por:

Como parte del proceso de envejecimiento, con frecuencia se presentan pérdidas de audición progresivas. Cuando esta pérdida es más severa puede afectar la comprensión del lenguaje.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_empty_space height=»20px»][vc_column_text]

Tipos
de hipoacusia

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Las causas de pérdida de audición y sordera pueden ser congénitas o adquiridas.

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¿Cómo se diagnostica
la hipoacusia

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Para diagnosticar la hipoacusia el médico puede apoyarse en varias pruebas, entre ellas la evaluación física, las pruebas generales de detección, las pruebas de diapasón o la audiometría.

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Grados de
hipoacusia

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Se determina midiendo la pérdida de capacidad auditiva en decibelios (dBHL) a través de exámenes como la audiometría. Es importante resaltar que el nivel auditivo puede medirse tanto para sonidos de tono puro como para sonidos del habla. De igual forma, como la hipoacusia puede darse en un solo oído o en ambos, también puede corroborarse si la pérdida auditiva es unilateral o bilateral.

El nivel de hipoacusia que padece una persona se clasifica en leve, moderada, severa o profunda.

Audición normal: la persona está en la capacidad de oír sonidos suaves por encima de 20 dBH

Hipoacusia leve: en este caso, a la persona se le dificulta entender el habla, en especial en ambientes donde hay mucho ruido o cuando el volumen de la voz es muy bajo. Asimismo, le cuesta escuchar los susurros, siendo la hipoacusia en su mejor oído entre 25 y 39 dBHL.

Hipoacusia moderada: en este caso es muy difícil que una persona entienda el habla cuando el volumen de la voz es normal. Aquí la hipoacusia en su mejor oído se ubica entre 40 y 69 dBHL. En este punto se requiere de audífono (prótesis auditiva).

Hipoacusia severa: la hipoacusia en su mejor oído, en este punto, se ubica entre 71 y 90 dBHL. En este caso una persona requiere prótesis auditiva o un implante coclear pues no tiene la capacidad de escuchar lo que otra persona le dice, solo es capaz de percibir algunos sonidos fuertes.

Hipoacusia profunda: hipoacusia en su mejor oído de más de 90 dBHL. Aquí, la persona no oye nada de lo que se habla, salvo algunos sonidos muy fuertes que puede percibir, por lo que tiene que recurrir a la lectura de labios y/o lengua de señas, a información visual complementaria o a un implante coclear.

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Audifonos e implantes
cocleares

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Los audífonos son aparatos que se encargan de amplificar los sonidos y están compuestos de un micrófono, un amplificador y una bocina. Un implante coclear es un equipo médico electrónico, de dos partes, externa e interna, que se pone detrás de la oreja, debajo de la piel o a través de una intervención quirúrgica. Los implantes cocleares, a diferencia de los audífonos, transforman las señales acústicas en señales eléctricas que estimulan el nervio auditivo y permiten a una persona con un grado de hipoacusia severa o profunda tener una representación útil de los sonidos para ayudarle a comprender el habla.

La mayoría de los tipos de pérdida de la audición son irreversibles. Sin embargo, el médico o el especialista de la audición, en conjunto con el paciente, pueden tomar algunas medidas para mejorar la audición.

Limitar la duración y la intensidad de la exposición al ruido, considerar someterte a pruebas periódicas de la audición y cuidar los oídos en actividades como andar en moto, cazar, usar herramientas eléctricas, dejar de escuchar música a alto volumen o conciertos de rock, el uso de protectores auditivos o tomar descansos pueden proteger los oídos y son medidas recomendables para la salud auditiva.

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Espero que la información contenida en este blog haya sido de utilidad para ti.

Dra. Paola Freire
Otorrinolaringóloga
Atención presencial y videoconferencia:
0998089307 o 023824440 op. 5[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]